Monasterio de San Pedro de Roda

No se podría entender que estando por el Alto Ampurdán se pasase por alto una visita al Monasterio de San Pedro de Roda, una de las joyas del románico de España declarado en 1993 como Bien Cultural de Interés Nacional y del que se tienen noticias desde el año 878.

Los accesos son muy fáciles y cómodos pudiendo dejar el coche muy cerca.

Se llega a pie por dos caminos urbanizados planos y no muy largos.

Desde luego que vale la pena hacer una visita al interior, pero sólo con pasearse por fuera y contemplar todo el conjunto sobrecoge por su belleza arquitectónica y por el paisaje que lo rodea, las magníficas vistas sobre la costa y los pueblos de Llançá y Port de la Selva.

Te aconsejo que des la vuelta a todo el monasterio, e incluso, subir un poco la ladera para verlo desde arriba, impresiona ver las torres, una el campanario de estilo románico lombardo, en contraste con el azul marino del mar de fondo, es una auténtica preciosidad.

Estremece pensar cómo pudieron construir semejante monumento arquitectónico en aquella época con herramientas rudimentarias y a esta altura.

Entonces no habría carreteras ni pueblos cercanos, debería ser una zona despoblada y alejada, que es lo que buscaban los monjes benedictinos.

A pesar de haber sido abandonado y saqueado en varias ocasiones ha perdurado en el tiempo para que lo podamos disfrutar ahora en muy buen estado de conservación.

Te sugiero que hagas una reserva para hacer una visita guiada del interior.

Todas las visitas guiadas requieren reserva previa online en la web.

¡Te recomiendo que te quedes a comer y hagas un picnic en la Sierra de Rodas!

Te cuento más sobre este monasterio, la ermita de Santa Elena, el castillo de San Salvador, y los pueblos Selva de Mar, Vall de Santa Creu, Port de la Selva y Llançà.