¿Sabías qué dicen las leyendas que la primera taza de chocolate en Europa se sirvió en Zaragoza? ¡Más concretamente en el Monasterio de Piedra!
Y es que, cuando el frío del Pirineo Aragonés se hace sentir, nada mejor que un reconfortante chocolate caliente.
Hoy os llevo en un recorrido por algunos de los mejores lugares para disfrutar de esta delicia, perfecta para los amantes del chocolate y el invierno.
La Fama, reconocida a nivel nacional, es una parada obligatoria en Zaragoza. Este acogedor lugar no solo ofrece un delicioso chocolate caliente, sino también una variedad de pastelería artesanal que incluye churros, porras y buñuelos.
A pesar de ser un local pequeño, su terraza es un encanto para quienes prefieran disfrutar al aire libre.
Regentada por Domingo desde 1977, ofrece el escape perfecto para el frío. Conocida por su excelente servicio y ambiente acogedor, aquí podrás disfrutar de un chocolate insuperable y churros recién hechos que te harán agua la boca.
¡No dejes de probar los churros cubiertos de chocolate, son un must!
La pastelería Joakyn en Aínsa es conocida por su amable servicio y productos recién hechos. Tan pronto como entras, te envuelve su atmósfera, ideal para disfrutar de un momento dulce en un día de frío.
No te pierdas sus deliciosos dulces, son la compañía perfecta para un chocolate caliente.
Para una experiencia clásica de invierno, Granja Anita en Huesca es el lugar. Con un chocolate bien espeso y churros en raciones generosas, es la parada perfecta para una tarde de invierno.
La rapidez en el servicio y la tentadora calidad hacen de Granja Anita una opción golosa y acogedora para todos.
Desde 1977, la churrería Satur en la avenida de San José se ha convertido en un clásico zaragozano.
Ideal para los madrugadores y trasnochadores, esta chocolatería abre sus puertas a las 6 horas, ofreciendo una combinación perfecta de churros y un chocolate denso y espectacular.
La relación calidad-precio y el ambiente familiar la hacen una elección segura para los amantes del buen chocolate.
En el Pirineo Aragonés, el chocolate caliente no es solo una bebida; es una experiencia que abriga y endulza hasta los días más fríos. Así que, ya sea en Zaragoza, Benasque, Aínsa o Huesca, ¡hay un rincón esperándote con una taza de chocolate caliente y una sonrisa acogedora!
Si te quedas con ganas de más, te animo a qué descubras dónde tomar chocolate caliente en la Costa Brava.
Jara, natural de Panticosa y nuestra experta local en los Pirineos
Dirección Benasque, España
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