¿Has pensado en una escapada a un pueblo tranquilo y silencioso?
Aquí te presento un buen destino, Canejan, un pequeño pueblo colgado en una de las últimas laderas antes de cruzar la frontera con Francia.
Es preciosa la vista desde lejos del pueblo dominando por encima del valle de Torán.
Con este vuelo de altura el pueblo disfruta de muchas horas de sol, esto lo convierte en un lugar especialmente indicado para reponer energía, estar un tiempo disfrutando del silencio, la calma, el sol y las magníficas vistas que le dan su privilegiada localización.
Desde aquí podrás hacer excursiones como al mirador de Cap des Mahls, o un sendero que lleva a San Juan de Torán o si prefieres algo más fuerte tienes toda la montaña fronteriza con el punto del Col de Puymaurin.
Pero puede que no quieras hacer otra cosa más que descansar y pasear por su pequeño núcleo y contemplar las vistas del entorno desde alguno de sus miradores, especialmente recomendables para contemplar el Aneto que desde aquí se puede ver en todo su esplendor, siempre vestido de blanco de sus nieves perpetuas.
Muy cerca visita el pueblo Bausén y su bosque de hayas Carlac.
Y haz el camino de Lana en Les.
Jara, natural de Panticosa y nuestra experta local en los Pirineos
Dificultad de la ruta o acceso
Se accede desde la carretera n-230 en el Pont de Pontaut. Se sube por la carretera que va por el valle de Torán y en un punto que está indicado se gira a la izquierda.
Dónde comer cerca
Restaurante Casa Deó: Comida casera de la zona con una alta valoración y a buen precio. Posee una agradable terraza al sol.
Dónde dejar el coche
Hay un aparcamiento gratuito justo en la entrada del pueblo.
Dirección Canejan, España
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