Descubre el encanto del Monasterio de San Juan de la Peña

¿Te imaginas explorando un monasterio rupestre escondido bajo una impresionante roca, en pleno corazón de Aragón?

¡El Monasterio de San Juan de la Peña te permitirá descubrir joyas del arte románico, leyendas de antiguos reyes y la naturaleza en su estado más puro!

Un tesoro escondido en la roca

Construido a principios del siglo X, el Monasterio de San Juan de la Peña se alza majestuoso abrazado por la roca que lo ha protegido durante siglos. 

¿Sabías que este lugar fue el primer panteón real de Aragón y guarda en su interior la memoria de los orígenes de esta histórica región? 

Desde sus primeros reyes hasta la huella de su pasado, ¡cada piedra tiene una historia que contar!

Un recorrido por la historia del Monasterio de San Juan de la Peña

Tu entrada al monasterio te abre las puertas a dos joyas arquitectónicas: el Monasterio Viejo y el Monasterio Nuevo, distanciados apenas por 1,5 km el uno del otro. 

No te pierdas la visita a la iglesia románica de Santa María en Santa Cruz de la Serós. Te recomiendo que te animes a hacer la visita guiada por el recinto para poder captar cada detalle de su legado. 

Para asegurar tu experiencia, mejor compra la entrada online anticipada.

Más que un viaje cultural

La visita al Monasterio de San Juan de la Peña trasciende lo cultural. En el Monasterio Nuevo, rehabilitado y acogedor, se encuentra el Centro de Interpretación del Reino de Aragón, un espacio que fusiona historia con modernidad. 

Y si el hambre aprieta, la cafetería del monasterio te espera con una oferta que va desde bocadillos especiales hasta pizzas recién horneadas, en un entorno de tranquilidad y vistas inigualables. 

Si vas a realizar tu visita durante los meses de verano debes saber que, desde Santa Cruz de la Serós, el acceso se realiza únicamente por autobús, garantizando así la preservación del entorno natural. 

Para aprovechar más tu escapada puedes visitar la ciudad de Jaca, el municipio de Sabiñánigo o realizar la ruta en bicicleta por las Iglesias de Serrablo.